Descubre la magia del ácido hialuronico para una piel radiante. Este aliado no solo hidrata tu piel, sino
que también promueve la firmeza y suavidad. El relleno con ácido hialurónico es sin duda uno de
los tratamientos más populares y uno de los más demandados por sus beneficios y resultados. El ácido
hialurónico es una molécula que se encuentra de manera natural en nuestro organismo y es capaz de
contrarrestar los efectos del envejecimiento, reemplazando el volumen perdido y la formación de
arrugas.
Con el paso del tiempo los niveles de ácido hialurónico disminuyen con la edad y va desapareciendo de
nuestra piel, esta pierde firmeza e hidratación, según avanzan los años, se vuelve más fina, comienzan a
aparecer las primeras arrugas superficiales y las primeras manchas, lo que produce un aspecto
deshidratado, flácido y con falta de elasticidad en nuestro rostro.
Aunque el ácido hialurónico se asocia normalmente a la cosmética (cremas o fármacos), sus efectos no
son iguales que cuando se inyectan, ya sea en la cara o en otras áreas médicas como la rehabilitación y
la traumatología.
El ácido hialurónico es un relleno inyectable y reabsorbible que se utiliza para minimizar arrugas y
aportar volumen de manera natural. Al ser infiltrado en la piel, el ácido hialurónico reduce las arrugas y
mejora la elasticidad y turgencia de la piel.

¿Donde lo aplicamos?

1. Labios
2. Menton
3. Lifting facial
4. Perfilamiento mandibular
5. Ojeras
6. Rinomodelación